Intel nos envía una colaboración editorial en donde tratan el tema de como el componente TI de una organización se ha visto forzado a cambiar y pasar de proveer tecnología, a elaborar estrategias

De proveedor de tecnología a estratega – El cambio del papel de TI y su contribución para las empresas
Por Lorena Sequeira, Gerente de Mercadeo de Intel para América Latina

Tradicionalmente el uso de la tecnología no ha sido asociado con la estrategia de las empresas. La tecnología suele considerarse como una herramienta más que apoya la operación, pero que en realidad no contribuye a crear una ventaja competitiva – ¡Pero eso ha cambiado!

Conforme el conocimiento y el acceso oportuno a la información influyen más y más en el éxito del negocio (conocimiento del mercado, de los competidores, de los clientes, de las oportunidades), la tecnología, correctamente aplicada, se ha ido convirtiendo en un aliado cada vez más estratégico para el crecimiento y la consolidación de las compañías.

Sufrimos, actualmente, una saturación de datos y los datos por sí solos no son de valor. El valor lo provee la información que se obtiene analizando los datos disponibles y aplicando el resultado de ese análisis en el foco empresarial.

Este cambio de perspectiva no implica eliminar todo lo que se ha construido y empezar de cero. Por el contrario, significa aprovechar lo existente como una base para crecer. No es posible apoyar la estrategia sin conocer la operación, ni proveer apoyo en los procesos de toma de decisiones o en el crecimiento del negocio si no se tiene la infraestructura base que apoye la innovación.

Ser visto como un socio activo en la toma de decisiones no es algo que se logre de la noche a la mañana, requiere un trabajo fuerte de parte de la organización de TI para entender su posición en la empresa, los servicios que provee, las competencias que tiene, cómo puede apoyar la estrategia de la compañía y qué necesita para contribuir como socio real y todo ello traducirlo a un lenguaje que entiendan los demás: gerencia, finanzas y otras áreas clave, alejándose lo más posible de un lenguaje de “bits y bytes”.

Para los profesionales en informática, es muy claro qué significa duplicar el ancho de banda de la WAN, aumentar el poder de procesamiento de las PCs y crear servicios basados en la nube, pero para quienes no conviven tan de cerca con el “tras bambalinas” tecnológico, esas frases pueden no tener significado.

Sin embargo, si las “traducimos” a frases como: facilitar que la información de compras esté disponible en la mitad del tiempo, que la generación de los reportes de pagos tome dos horas menos o que la información de mercado esté disponible para todos los que deben tomar decisiones con ella, sin importar en cuál oficina se encuentren, tienen un sentido de valor fuera de TI y es lo que necesitamos comunicar.

El cambio de rol puede definirse como un proceso de madurez, tanto de la organización de TI como de la empresa. Por lo que lo primero a tener en cuenta es que los datos y los procesos que están funcionando pueden proveer la base para iniciar ese cambio.

Para empezar a posicionarse como un aliado estratégico en la empresa, TI debe poder demostrar que es más que simplemente el grupo que provee y arregla computadores; debe demostrar que efectivamente es una organización que puede apoyar el crecimiento de la empresa y la consolidación de ventajas competitivas a través de la correcta integración de la tecnología y el análisis de la información.

Por Lorena Sequeira, Gerente de Mercadeo de Intel para América Latina